La atención a familias desplazadas por la violencia en Medellín
La Administración Distrital de Medellín ha brindado asistencia a 144 núcleos familiares desplazados por la violencia en diversas regiones del país, enfrentando una crisis humanitaria significativa.
Atención integral a familias desplazadas
Entre el 1 de enero y el 20 de febrero de 2025, la Administración Distrital de Medellín ha implementado un programa de atención integral que ha beneficiado a 144 familias desplazadas, lo que equivale a un total de 354 personas. Esta ayuda humanitaria es una respuesta directa a los recientes enfrentamientos armados que han tenido lugar en la región del Catatumbo, así como al paro armado que ha afectado a El Chocó y a los hechos de violencia reportados en Antioquia.
Albergue temporal y asistencia inmediata
En la actualidad, 42 núcleos familiares, que suman un total de 121 personas, se encuentran alojados en un albergue habilitado por la Alcaldía de Medellín. Este espacio ha sido acondicionado para proporcionar refugio y apoyo a aquellos que han tenido que huir de sus hogares debido a la violencia. Durante el periodo mencionado, 40 familias, representando a 91 personas, llegaron a Medellín tras escapar de la violencia en cuatro municipios del Catatumbo: Tibú, El Tarra, Convención y Hacarí.
De estas 40 familias, 38, que equivalen a 88 personas, recibieron atención inmediata. De ellas, dos familias accedieron a alojamiento temporal, mientras que las 36 restantes fueron acogidas por redes familiares o sociales. Además, se les proporcionaron kits de alimentos y apoyo económico para facilitar su adaptación a la nueva situación.
Desplazamientos desde El Chocó
En el mismo periodo, otro grupo significativo de 102 familias, es decir, 246 personas, llegó a Medellín desde Quibdó y otros municipios de El Chocó. De estas, 73 familias correspondían a 170 personas provenientes de Quibdó, mientras que 29 familias, que suman 76 personas, llegaron de otras localidades de El Chocó. Este desplazamiento ha sido motivado por el paro armado que ha impactado de manera severa a la región, generando una crisis que ha llevado a muchas familias a buscar refugio en Medellín.
Atención a familias de Toledo, Antioquia
Recientemente, esta semana, se atendieron a dos familias, es decir, 17 personas, que llegaron desde Toledo, Antioquia, tras verse involucradas en hechos relacionados con un homicidio. Este tipo de situaciones demuestra la continua vulnerabilidad de muchas comunidades en el país y la necesidad de una respuesta rápida y efectiva por parte de las autoridades locales.
Compromiso del gobierno local
El secretario de Paz y Derechos Humanos, Carlos Alberto Arcila Valencia, ha subrayado el compromiso de la Administración Distrital con la protección y asistencia a las víctimas del conflicto armado. En sus palabras, destacó:
“Venimos brindando toda la ruta de protección para las víctimas: llegan al Ministerio Público, Personería, Defensoría y Procuraduría y allí declaran. Mientras ocurre que sean incluidos en la Unidad Nacional de Víctimas, como víctimas del conflicto, se les brinda ayuda humanitaria, acompañamiento psicológico y jurídico, y albergue.”
Experiencias de los desplazados
Uno de los desplazados del Catatumbo, quien llegó a Medellín junto a su esposa y sus cinco hijos, compartió su experiencia sobre la atención recibida en el albergue. Resaltó no solo el apoyo inmediato, sino también las oportunidades laborales que se le han presentado:
“Esa obra que tienen aquí es lo mejor de lo mejor; yo estoy muy agradecido porque aquí nos han recibido con los brazos abiertos, la Alcaldía, la Personería, Derechos Humanos. Nos han brindado apoyo psicológico, la comida, la dormida, y vea, con el modo de ser de uno, hasta opción de trabajo me dieron.”
Desafíos y necesidades a futuro
La situación de los desplazados en Medellín pone de manifiesto la necesidad de un enfoque más integral y sostenido en la atención a las víctimas del conflicto armado. A medida que la violencia persiste en diversas regiones del país, es fundamental que las autoridades continúen trabajando en la implementación de políticas efectivas que no solo aborden la emergencia inmediata, sino que también ofrezcan soluciones a largo plazo para la reintegración de estas familias en la sociedad. La colaboración entre distintas entidades gubernamentales y organizaciones no gubernamentales es esencial para garantizar que se cumplan los derechos de estas personas y se les brinde el apoyo necesario para reconstruir sus vidas.

Publicar un comentario