La Cancillería admite retraso en la implementación del nuevo modelo de pasaportes
La senadora Angélica Lozano expone preocupaciones sobre la situación actual de la expedición de pasaportes en Colombia, tras la respuesta de la Cancillería a un derecho de petición.
               Retraso en la implementación del nuevo modelo de pasaportes
La senadora Angélica Lozano ha hecho pública una preocupación significativa respecto a la situación de los pasaportes en Colombia. En una reciente declaración, Lozano reveló que la Cancillería respondió oficialmente a un derecho de petición radicado el pasado 19 de junio. En esta respuesta, se confirma que el nuevo modelo de pasaportes, que se esperaba estuviera operativo el 1 de septiembre, no podrá entrar en funcionamiento en esa fecha, tal como había anunciado el Gobierno Nacional.
Advertencias sobre la crisis institucional
Lozano calificó como “gravísima” la situación que ha expuesto el Ministerio de Relaciones Exteriores. La senadora no solo expresó su preocupación, sino que también advirtió sobre un inminente riesgo de crisis institucional en la expedición de pasaportes, un derecho fundamental para millones de colombianos que residen tanto dentro como fuera del país. La falta de un modelo operativo adecuado podría tener repercusiones serias para aquellos que dependen de este documento para viajar y realizar trámites esenciales.
Falta de acuerdos y recursos
En su declaración, Lozano destacó varios puntos críticos que han sido confirmados por la Cancillería. “La Cancillería ha confirmado por escrito que no hay acuerdo firmado con Portugal, que la planta de producción nacional no está lista y que no existe un presupuesto que garantice los recursos necesarios para asegurar la continuidad en la expedición de pasaportes hasta 2030”, afirmó la senadora. Esta falta de planificación y recursos adecuados ha llevado a la preocupación de que el país esté improvisando en un aspecto tan crucial como la emisión de pasaportes.
Posibles soluciones y tiempos de espera
La senadora también hizo hincapié en que, incluso si se lograra firmar el acuerdo con Portugal, se requerirían al menos 35 semanas para que el nuevo modelo entre en operación. Este tiempo de espera es considerable y plantea serias dudas sobre la capacidad del Gobierno para manejar la transición de manera eficiente.
“Como un último factor que afecta el cronograma, están los tiempos que requiere la Imprenta Nacional Casa de Moneda para iniciar la operación, los cuales, según información suministrada por esta entidad, podrían tardar hasta 35 semanas después de la firma del convenio inter-administrativo, lo que haría inviable comenzar operaciones el 1 de septiembre de 2025”, explicó Lozano. Este retraso en los tiempos de operación complica aún más la situación y deja a muchos colombianos en una posición vulnerable.
Incertidumbres sobre la infraestructura y la capacidad instalada
La senadora Lozano también mencionó que hay preguntas clave sobre la infraestructura, la tecnología y la capacidad instalada que han sido trasladadas por competencia a la Imprenta Nacional de Colombia. Esto pone de manifiesto una falta de claridad y preparación en el proceso de emisión de pasaportes. “Esto evidencia que el país no cuenta hoy con una planta de producción nacional habilitada ni disponible para asumir el proceso”, concluyó Lozano. Esta afirmación resalta la necesidad urgente de que el Gobierno tome medidas efectivas para garantizar que los derechos de los ciudadanos no se vean comprometidos.

           
           
           
           
           
           
           
           
           
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