Plantón en San Carlos por incumplimientos del ICBF

La reciente suspensión del contrato entre el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF) y la Corporación Educación Sin Fronteras ha provocado un plantón significativo frente al Centro de Desarrollo Infantil (CDI) de San Carlos. Esta protesta, liderada por padres y madres de familia, busca llamar la atención sobre el cierre de los centros que brindan atención a los más pequeños del municipio.

El CDI de San Carlos tiene la responsabilidad de atender a un total de 236 niños y niñas, quienes dependen de estos servicios para su desarrollo y bienestar. Sin embargo, esta es la tercera ocasión en el año en que la prestación del servicio se ve interrumpida, lo que no solo afecta a los menores, sino también a los trabajadores del centro. La comunidad, preocupada por el futuro de sus hijos, decidió salir a las calles para manifestar su descontento y exigir respuestas inmediatas.

Voces de la comunidad

Durante la manifestación, Jenny Giraldo, una de las madres de familia presentes, expresó su angustia y la de muchos otros padres al afirmar:

“Nos encontramos en las instalaciones del CDI, reiterando la necesidad de que nuestros niños y niñas se encuentren de nuevo en este lugar”.

Esta declaración refleja la desesperación y la urgencia que sienten las familias de San Carlos ante la falta de atención y el riesgo de que sus hijos queden desprotegidos.

La comunidad no solo se preocupa por la interrupción del servicio educativo, sino que también destaca que este cierre afecta a todo el municipio. La falta de atención a los niños repercute en la estabilidad emocional y social de las familias, quienes dependen de estos centros no solo para la educación de sus hijos, sino también para el apoyo en la crianza y el desarrollo de habilidades sociales. Por ello, exigen que el ICBF implemente una solución definitiva que garantice la continuidad del servicio.

Impacto en el personal y las familias

Además de las preocupaciones de los padres, el impacto de esta situación también se extiende al personal que trabaja en el CDI. Johana Serna, secretaria de Bienestar del municipio, enfatizó la situación crítica que enfrentan las trabajadoras del talento humano, quienes ven amenazada su estabilidad laboral. En sus palabras:

“Mujeres del talento humano, que también se ve afectada su estabilidad laboral, familias del municipio de San Carlos que nos vemos afectadas por esta interrupción. Hacemos un llamado al ICBF para que garantice la atención oportuna, pertinente y permanente de nuestros niños en los Centros de Desarrollo Infantil”.

Esta declaración pone de manifiesto la complejidad del problema, que no solo se limita a los niños, sino que también abarca la situación laboral de quienes están dedicados a su cuidado y educación.

La comunidad de San Carlos ha mostrado una fuerte cohesión en torno a esta problemática, organizándose para hacer sentir su voz. La preocupación por el bienestar de los niños ha unido a padres, madres y profesionales del sector, quienes demandan respuestas claras y soluciones efectivas por parte de las autoridades competentes. La situación actual ha generado un clima de incertidumbre que afecta a todos los involucrados, y es fundamental que se tomen medidas inmediatas para resolverla.

Acciones del gobierno local

Frente a esta crisis, la Gobernación de Antioquia ha tomado la iniciativa de proporcionar paquetes alimentarios a las familias afectadas. Esta medida busca mitigar el impacto que la suspensión del servicio tiene en los niños, evitando que queden desprotegidos durante este periodo de incertidumbre. La entrega de alimentos es un paso importante, pero la comunidad espera que esto sea solo el comienzo de un proceso más amplio que garantice la reactivación del servicio de manera permanente.

La situación en San Carlos es un reflejo de los desafíos que enfrentan muchas comunidades en Colombia en relación con la atención infantil y el acceso a servicios básicos. La falta de continuidad en estos servicios no solo afecta a los niños, sino que también repercute en el tejido social de la comunidad, creando un ciclo de desamparo y vulnerabilidad que es necesario romper. La atención a la infancia debe ser una prioridad, y la comunidad de San Carlos está decidida a luchar por sus derechos y los de sus hijos.