Hasta $ 100 millones de recompensa por información que permita la captura de Darwin Arango Aguirre, señalado de asesinar a su hijastra en Medellín

Las autoridades están tras la pista de un hombre que presuntamente habría asesinado a una bebé de dos años de edad. Es por eso que ofrecen hasta $ 100 millones de recompensa por quien suministre información sobre su paradero.

Desde la alcaldía de Medellín dieron a conocer que se trata de Darwin Stiven Arango Aguirre, quien se encuentra prófugo de la justicia y es el principal sospechoso de acabar con la vida de la menor, quien sería su hijastra.

A través de su cuenta de X, el mandatario detalló que Montoya Cardona es el presunto responsable del crimen de la bebé, ocurrido el pasado 10 de julio del presente año, en el barrio Belencito Corazón, en el occidente de Medellín.

“Este es un crimen indignante y absolutamente reprochable que como sociedad no vamos a tolerar. La muerte de Amaia no quedará impune”, agregó el mandatario, quien pidió la mayor colaboración de la ciudadanía para ayudar a las autoridades a esclarecer este caso.

“Pedimos a quien tenga información sobre el paradero de Darwin Stiven Arango Aguirre que se comunique de inmediato con las autoridades. Su colaboración es clave para hacer justicia. Este asesino cae porque cae. La muerte de Amaia no quedará impune”, escribió el mandatario antioqueño en la mencionada red social.

El alcalde Federico Gutiérrez también recordó que el pasado martes 22 de julio fue capturada la madre de la víctima, quien fue acusada de ser la principal cómplice del asesinato.

Aunque la capturada no aceptó los cargos, le ordenaron medida de aseguramiento en establecimiento carcelario desde donde deberá afrontar el proceso judicial que se adelanta en su contra.

Se debe tener en cuenta que Darwin Stiven Arango Aguirre decidió desaparecer del radar de las autoridades, tras las inconsistencias en su relato sobre el estado de salud de la menor, en el momento en que la llevó a la Unidad Intermedia de San Javier el 10 de julio en la noche.

Ante este panorama, este caso empezó a adquirir una dimensión judicial, en especial, con el dictamen de Medicina Legal, que había emitido un pronunciamiento en el que indicaba que la víctima murió como consecuencia de múltiples lesiones que le fueron propinadas con un objeto contundente en diferentes partes del cuerpo, como tórax, cabeza, pómulos, dorso y extremidades.

Según el informe forense, el cuerpo de la pequeña también presentaba signos de abuso sexual.