Impacto del cierre en Las Areneras en el turismo y la agricultura del Suroeste
El cierre diario del sector Las Areneras en Amagá pone en riesgo la llegada de turistas y afecta a los agricultores de la región.
El cierre en Las Areneras y su repercusión en el turismo
El cierre diario del sector Las Areneras, ubicado en el municipio de Amagá, ha generado una creciente preocupación entre los empresarios del sector turístico. Este cierre, programado para comenzar el lunes 24 de noviembre, se considera un riesgo significativo para la afluencia de visitantes, especialmente durante las temporadas altas y los fines de semana, cuando el flujo de viajeros suele ser mayor.
Maritza Vanegas, representante de la Veeduría Ciudadana Turística Sostenible, expresó su alarma al respecto, indicando que este cierre podría agravar la situación económica del sector turístico. Según Vanegas, “afectando a unos 400.000 habitantes, 1.700 establecimientos del municipio de Jardín, el cual ya veníamos afectados por las emergencias viales que hemos tenido”. La interconexión entre los municipios es vital para el desarrollo del turismo en esta región, y cualquier obstáculo en las vías puede tener repercusiones severas en la economía local.
La voz de los agricultores ante el cierre
Los agricultores, especialmente aquellos dedicados a la producción de café, también han alzado la voz en contra del cierre. Alertan que esta medida limitará el transporte de productos hacia los centros de acopio y mercados, lo que podría resultar en retrasos, pérdidas de calidad y sobrecostos logísticos. Alonso Suárez, vocero de Dignidad Cafetera, comentó: “Hoy estamos pagando el costo y no Covipacífico. Ellos están acomodando sus horarios como quieren, vemos lo de Sinifaná, lo habíamos advertido, nunca le hicieron el tratamiento y no es solamente el Suroeste afectado, también es el sur del país”. Este comentario resalta la frustración de los agricultores que sienten que sus preocupaciones no están siendo atendidas adecuadamente.
El impacto del cierre no solo se limita al sector turístico y agrícola, sino que también afecta a la movilidad de los ciudadanos. Los transportadores han manifestado que la disminución de pasajeros será inevitable, ya que muchos viajeros podrían evitar desplazarse por el temor a quedar atrapados en los cierres. Juan Pablo Acosta, líder transportador, afirmó: “Un municipio como Amagá puede movilizar cerca de 2.500 personas diarias y eso podría desincentivar el uso en este momento”. Esta situación pone de manifiesto la importancia de una infraestructura vial adecuada y accesible para el bienestar de la comunidad.
La respuesta de la concesión Covipacífico
Ante la problemática generada por el cierre, la concesión Covipacífico, responsable de la vía, ha emitido un comunicado en el que señala que el Gobierno Nacional ha incumplido con el giro de recursos necesarios para llevar a cabo algunas obras complementarias que podrían mitigar el impacto del cierre. Esta falta de recursos ha llevado a una situación crítica en la que tanto el sector turístico como el agrícola se ven amenazados por condiciones que podrían haberse evitado.
La interconexión entre los diferentes sectores de la economía local es fundamental para el desarrollo sostenible de la región. La falta de atención a las necesidades de infraestructura puede resultar en un efecto dominó que perjudique a múltiples sectores. Las voces de los empresarios, agricultores y transportadores reflejan una preocupación compartida que exige atención y acción por parte de las autoridades competentes.
A medida que se acerca la fecha del cierre, la incertidumbre crece entre los habitantes de la región, quienes dependen de la llegada de turistas y del transporte eficiente de sus productos. La situación actual plantea un desafío significativo que requiere un enfoque colaborativo para encontrar soluciones que beneficien a todos los involucrados.
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