Captura de Marlon Andrés Valencia Espinoza, alias ‘Fénix’, enlace de ‘Los Tiguerones’ en Colombia
Marlon Andrés Valencia Espinoza, conocido como ‘Fénix’, fue detenido tras tres años de estar prófugo, siendo un importante contacto de la banda ecuatoriana en el país.
En un operativo binacional que ha llamado la atención de las autoridades, Marlon Andrés Valencia Espinoza, conocido en el mundo criminal como ‘Fénix’, fue capturado en el municipio de La Estrella, Colombia. Este individuo se había mantenido en la clandestinidad durante tres años, tras haber sido condenado en Ecuador a una pena de 25 años de prisión por múltiples delitos, entre los que se incluye el asesinato. Su arresto representa un golpe significativo para la organización criminal conocida como ‘Los Tiguerones’, que opera en Ecuador y ha extendido sus redes hacia Colombia.
Un objetivo de alto valor para la justicia ecuatoriana
Para la justicia de Ecuador, la captura de ‘Fénix’ es un avance crucial en la lucha contra el crimen organizado. Este sujeto no solo es un fugitivo, sino que también ha sido identificado como un enlace fundamental para ‘Los Tiguerones’ en el territorio colombiano. Según Jhon Reimberg, ministro de Justicia de Ecuador, “él tiene una sentencia en firme de 25 años de prisión por asesinato y otros delitos más que tiene que cumplir”. Reimberg destaca que ‘Fénix’ estaba operando desde Colombia, dirigiendo actividades de la organización en Ecuador y manejando aspectos del narcotráfico desde el exterior.
La influencia de ‘Los Tiguerones’
‘Los Tiguerones’ es una facción que se separó de ‘Los Choneros’, la banda criminal más buscada en Ecuador. Esta organización ha logrado establecerse en varias provincias, siendo Esmeraldas una de las más afectadas por sus actividades delictivas. Con el arresto de ‘Fénix’, las autoridades esperan debilitar la estructura operativa de esta banda que ha conseguido forjar alianzas con otros grupos criminales en Colombia, ampliando así sus fuentes de ingresos ilícitos.
El tráfico de sustancias y su impacto en Colombia
Las investigaciones han revelado que ‘Fénix’ no solo se limitaba a coordinar el narcotráfico, sino que también estaba involucrado en el comercio de sustancias controladas. Luis Fernando Quijano Moreno, presidente de la ONG Corpades, explicó que “hay un negocio criminal de comercio, de allá nos llega la ketamina, no en frasquitos sino en grandes cantidades, para lo que llaman las aguas para la elaboración del Tusi Brutal”. Esta afirmación pone de manifiesto la complejidad del tráfico de drogas en la región, donde la ketamina se ha convertido en un elemento clave en la producción de nuevas sustancias sintéticas.
Medellín y su papel en la minería ilegal
Además del narcotráfico, Medellín y el Valle de Aburrá se han convertido en epicentros para la compra y venta de mercurio, un mineral que se utiliza en la minería ilegal. Esta actividad ha crecido en paralelo con la expansión de organizaciones criminales que buscan maximizar sus ganancias a través de prácticas ilegales. Quijano también mencionó que en Ecuador, las mafias están lavando activos, un fenómeno que se ha visto facilitado por la dolarización de la economía ecuatoriana. Esto ha permitido que grupos delictivos operen con mayor libertad, utilizando el sistema financiero para encubrir sus actividades ilícitas.
La captura de ‘Fénix’ es solo una parte de un panorama más amplio que involucra la interconexión entre el crimen organizado en Ecuador y Colombia. La cooperación entre las autoridades de ambos países es crucial para desmantelar redes criminales que afectan la seguridad y el bienestar de sus poblaciones.
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